Las personas amables. Está semana ya hablamos de las personas que aman cosas y utilizan personas. Y, continuando con el tema, ahora hablaremos sobre el ¿Porqué algunas personas son tan amables con otros? Y todo lo que ello implica.
Primero, nos enfocaremos en la parte que no es tan divertida de ser amable. Muchas veces, te vas a encontrar con personas abusivas. Ellas te verán como una victima potencial, ya que, erróneamente se suele pensar que las personas amables son tontas (por decirlo de alguna manera). En otras ocasiones, pensaran que si eres amable es porque quieres obtener algo a cambio. O, incluso, muchos creerán que tienes un interés romántico o sexual en ellos.
Esto puede desanimar a algunos, ya que, obviamente no es agradable terminar con una etiqueta de interesado(a), tonto(a) o acosador(a) sexual. Cuando lo único que estás intentado hacer es ayudar a alguien con su problema. O, simplemente estás siendo tú porque no tienes problemas con nadie.
Las personas amables están mal.
La idea de que las personas amables son todas estas cosas, es solo algo que hemos desarrollado como una bandera roja en nuestro cerebro. Quizás en alguna ocasión confiamos en alguien, que al final terminó por decepcionarnos. Al analizar dicha situación, creemos que esa persona era super linda y amable. Es por eso que logró ganarse nuestra confianza. La realidad es que, esa persona no era tan linda, ni tan amable. Tal vez, por falta de experiencia. Porque dicha persona tenía otras cualidades que captaban nuestra atención. O, por la razón que sea. Pero, no prestamos atención a esas cosas que nos hubieran alertado de sus verdaderas intenciones. De esta manera, es como terminamos relacionando a las personas amables con alguien que tiene intenciones ocultas detrás de su forma de tratarnos.
Si bien, es cierto, que algunas personas fingen ser amables, solo para obtener de nosotros algo a cambio. También es verdad, que fingir de manera constante algo que no somos, no resulta perfecto. Y, en algún punto de la convivencia, comienzan a saltar ciertas incongruencias entre lo que se dice y lo que se hace. Así que, es cuestión de mantenernos atentos a las acciones de los demás. Poner límites, no ceder el acceso a nuestros bienes. Y, cuando esa persona se da cuenta de que no puede obtener lo que desea. O, si así lo deseas, se lo das. Simplemente se irá de tu vida sin más.
¿Por qué las personas son amables realmente?
Como segundo punto, hablaremos de ¿porqué las personas son amables realmente? Y esta es la parte bonita de alguien que es amable. Las personas son buenas con otros porque en algún punto de su vida la pasaron mal y desarrollaron empatía. Se sienten identificadas con ciertos problemas de los demás y no quieren que otros sufran lo que ellos ya sufrieron. Por lo tanto, hacen todo lo que está en sus manos para evitar, ayudar o sanar el dolor de aquel que tienen enfrente.
Y, de hecho, ayudar a otros a sanar sus heridas es una excelente forma de ayudarnos a nosotros mismos a entender aquellas cosas que nos duelen. De esta forma, nos permitimos ver la situación desde otro punto de vista.
Esa es la razón de que muchas personas que han sido victimas de algún tipo de abuso, ahora sean activistas sociales. Es como decir: ¡Ey, mira, me pasó esto, que no te ocurra a ti también!
En conclusión.
Ser amable no siempre resulta como esperamos. Siempre vamos a encontrar personas abusivas en nuestro camino. Pero eso no significa que debemos cambiar nuestra forma de ser. Simplemente tenemos que aprender a cuidarnos a nosotros mismos. No podemos ir por la vida sintiendo miedo de todas las personas a nuestro alrededor. Mucho menos, deberíamos de cambiar nuestra forma de ser por evitar ser lastimados. A final de cuentas, aquello que damos también nos produce una satisfacción al saber que estamos haciendo lo correcto y eso siempre será lo más importante. Así que, sé amable con los demás, pero no olvides empezar por ser amable contigo mismo.
