Antes de terminar el 2022, renovamos el mueble de la sala. Antes, ya había hecho lo mismo con el mueble del comedor. La meta es darles una nueva vida a todos los muebles de mi casa, ya que tienen varios años. Y, aunque la mayoría, se encuentran en buen estado, ya no van con la decoración que ahora tenemos.
Además, siempre es una excelente opción para darle un nuevo aire a tu hogar, sin tener que gastar demasiado o deshacerte de las cosas que ya tienes y que aún pueden seguir funcionando.
En esta ocasión, mi esposo estaba en casa, así que, se unió a la tarea. Fue mucho más fácil y el mueble quedó bastante mejor que el anterior, el cual pinte, prácticamente yo sola. Sobre todo, porque me ayudó mucho con la labor de lijar, que es lo más tardado y cansado.
En el artículo anterior, sobre este tema, dejé algunos tips, sobre lo que aprendí durante el proceso.
¿Cómo renovamos el mueble de la sala?
Lo primero que hicimos fue, limpiar todo el mueble perfectamente bien. De esta manera, nos aseguramos que quede libre de grasa, polvo y productos de limpieza. Después, le quitamos las puertas y todos los tornillos y pequeñas piezas de metal.
Proceso de lijado.
Una vez, hecho esto, cuando el mueble se encuentra completamente seco. Ya podemos comenzar a lijar. Yo prefiero utilizar una lijadora eléctrica, ya que hace mucho mas facil y rapido todo el proceso. Aun así, no te salvas de tener que pasar la lija a mano en los pequeños rincones y las zonas con decoración.
Por lo regular, utilizamos una lija de punto medio y otra de punto fino, para que la madera quede lo más limpia posible y sea más fácil que agarre la pintura.
Después, es bueno sacudir todo el polvo que soltó el proceso de lijado. En esta ocasión se me ocurrió pasarle una brocha seca y funcionó muy bien.
Quitar los jaladores de las puertas.
Una de las cosas que más me gusta es cambiar los jaladores a las puertas. La vez anterior, se soltaron fácilmente con un poco de solvente. Pero en esta, estaban muy pegados. Así que, tuve que utilizar una segueta para poder soltarlos, con lo cual dañe las puertas. Después de que mi esposo me ayudó a lijarlas, el daño ya no se notaba.
Comenzamos a pintar.
Por último, llegó el momento de pintar. La primera capa de pintura nunca se nota mucho. mi recomendación, es utilizar la pintura lo más rebajada posible, de esta forma se seca más rápido y la siguiente capa agarra más fácilmente sobre el pigmento de la anterior.
Dimos tres capas de pintura blanca y dos de pintura gris.
Conclusión sobre renovamos el mueble de la sala.
Después, viene la parte menos divertida que es limpiar todo el polvo y el desorden que ha quedado 😅😂, pero el resultado final vale la pena.
Es increible como cambia todo el ambiente, tan solo con un poco de pintura.